Eclipse solar: Cuando la noche irrumpe en pleno día
A pocas horas del esperado eclipse de sol anunciado para este martes 2 de julio a partir de las 15:22 de la tarde, las alumnas de 5° Básico a III° Medio tuvieron la oportunidad de aprender sobre este tema y así prepararse de mejor manera para vivir juntas esta experiencia que sin duda será inolvidable para cada una.
Elise Servajean, astrónoma y Doctora en Ciencias por la Universidad de Chile, les explicó sobre el funcionamiento del sistema solar y los planetas, les contó sobre los primeros eclipses registrados por las antiguas civilizaciones 3.340 años A.C., el uso se les daba en esas épocas y la importancia que tenía el poder predecirlos.
Les habló sobre las distintas fases de la luna y las diferencias entre un eclipse solar y lunar. Las alumnas tuvieron la oportunidad de hacer preguntas y resolver todas sus dudas.
Luego la exposición se centró en el eclipse solar del próximo martes 2 de julio, que será total en las regiones de Atacama y Coquimbo, y parcial en el resto de Chile, con una cobertura del 92% en la ciudad de Santiago. Explicó que este fenómeno es algo único y muy impresionante, ya que en pleno día la luz se empieza a oscurecer porque la luna tapa al sol.
Elise invitó a las alumnas a disfrutar este fenómeno, cuya máxima oscuridad será a las 16:38 horas y durará aproximadamente dos minutos. Sin embargo, les insistió con mucha fuerza en la necesidad de proteger sus ojos, usando lentes certificados bajo la norma ISO 12312-2 durante todo el tiempo que estén mirando el eclipse.
“Cuando miramos el sol, los ojos tienen un mecanismo de defensa y tienden a cerrarse, pero cuando se produce un eclipse -como se oscurece- la retina se dilata, se abre, porque cree que es de noche, entonces los rayos del sol entran con fuerza y pueden quemar la retina. Este daño es irreversible y como no duele nos podemos dar cuenta cuando ya hayamos perdido la visión”, explicó.
Finalmente contó que el 14 de diciembre de 2020 habrá otro eclipse solar en Chile, que tendrá una cobertura del 100% en el sur del país, en las regiones de La Araucanía y Los Ríos.
